Critican las metas educativas porque ignoran temas clave

Diario Clarín

Fecha de publicación: 27 de enero de 2014

Por Alfredo Dillon

De los casi 500 objetivos de Gobierno para 2014 que presentó, a principios de enero, el jefe de Gabinete Jorge Capitanich, cincuenta se refieren a educación. Entre ellos, tal vez el más significativo sea el mantenimiento de la inversión educativa en el 6,47% del PBI. Pero pese a que las metas abarcan los distintos niveles de enseñanza, los especialistas sostienen que entre las prioridades 2014 faltan cuestiones fundamentales, como la ampliación de la jornada extendida y la realización de evaluaciones censales para medir los aprendizajes. Tampoco se hacía mención directa a los jóvenes que no estudian ni trabajan (ver Después llegaron…) Además del sostenimiento de la inversión –reclamado por los expertos como c ondición necesaria, aunque no suficiente, para mejorar la calidad educativa– una de las grandes novedades para este año es el plan de capacitación Nuestra Escuela, que alcanzará a 300.000 docentes y 17.000 escuelas, públicas y privadas. “Es gratuito y en servicio, lo cual es una demanda de los docentes. Me parece una innovación importante porque toma el desafío de mejorar la enseñanza y fortalecer los equipos docentes en cada escuela”, dijo a Clarín Axel Rivas, investigador de Cippec.

Otras metas incluyen la construcción de 600 escuelas, la expansión de la cobertura de las salas de 4 y 5 años, y la continuidad del Plan Finespara que los jóvenes y adultos terminen la secundaria. También se formulan objetivos como alcanzar “un 75,72% de los niños con desempeños medios y altos en Lengua”, o “un 67,66% con desempeños medios y altos en ciencias naturales” en nivel medio. Las pretensiones son optimistas si se tiene en cuenta los resultados de la última prueba PISA, que arrojó que más de la mitad de los alumnos argentinos de 15 años no comprende un texto sencillo.

Guillermina Tiramonti, especialista de Flacso, se mostró sorprendida por estos objetivos y cuestionó: “¿Cuál es la combinación de recursos y medios que se pondrá en juego para que resulten justamente esos porcentajes? ¿Existe algún medio técnico para hacer ese cálculo? (verLa fantasía…).

Clarín les solicitó a los especialistas objetivos que ellos consideran prioritarios para 2014. Entre las propuestas recibidas, más las metas del Gobierno se armó el decálogo ideal para mejorar la educación(ver El decálogo…) Los expertos resaltaron que entre las prioridades 2014 no aparece la ampliación de la jornada extendida en las escuelas que reciben a estudiantes de sectores vulnerables. “En la ley de financiamiento, de 2005, se había propuesto llegar al 30% de los alumnos de educación básica con esta modalidad. Luego, en el Plan nacional de educación obligatoria y formación docente 2012-2016, se bajó a la mitad.

Ahora ni siquiera se menciona ”, señaló el economista Juan José Llach.

Alieto Guadagni, director del Centro de Estudios de la Educación Argentina, también lamentó la ausencia de la jornada extendida: “Esta meta está incumplida; según el Relevamiento Anual 2012 del Ministerio de Educación, a penas el 9% de los alumnos de las escuelas primarias estatales tiene jornada extendida o completa”. Representa un déficit que afecta a más de 758 mil estudiantes. “ La situación es particularmente grave en el conurbano, donde solo el 2% de los niños están beneficiados por esta modalidad”, advirtió Guadagni.

Otra cuestión que las metas oficiales deberían incorporar, desde el punto de vista de Llach, es la realización de evaluaciones censales –de todas las escuelas– para medir los aprendizajes, “de tal modo de saber cuáles están mejorando, cuáles igual y cuáles empeorando”. La edición 2013 del Operativo Nacional de Educación (ONE), impulsado por el Ministerio de Educación nacional, solo evaluó de manera censal a los alumnos del último año de la escuela media, e incluyó un examenmuestral a 70.000 estudiantes de secundaria y 160 mil de 3° y 6° grado de primaria.

Las metas presentadas por Capitanich también ponen el acento en el programa Conectar Igualdad, con el que se apunta a entregar 300.000 nuevas netbooks en las que, además, el Gobierno buscará “incrementar la exigencia de componentes nacionales”. Y se prevé la distribución de 9.750.000 libros de texto y literatura en las escuelas de todo el país.

Para Rivas, entre las principales novedades que traerá este año está la implementación del Indice de Mejora de la Escuela Secundaria Argentina (IMESA), un promedio que combina el tiempo que tardan los alumnos en terminar el ciclo, la tasa de egreso y los resultados del último ONE. Los resultados no serán públicos: la idea es que cada escuela los utilice para diseñar sus planes de mejora institucional.